A mediados del siglo XIX, concretamente en el año 1.858, los hermanos Rosal procedentes de Mataró, construyeron una fábrica textil a orillas del rio Llobregat, dando lugar a la primera colonia textil de Catalunya.
En 1.887 y tras la construcción de viviendas para los trabajadores y otros servicios, se acabó de construir la iglesia y el convento.
Ese mismo año, los amos de la colonia entregaron el convento a las Hermanas Carmelitas para que gestionaran dicho convento como residencia para las jóvenes trabajadoras de la colonia, escuela para niños y comedor para empleados de la colonia.
Las Carmelitas solo pudieron llevar la gestión hasta 1.924, ya que su orden religiosa les prohibía dar servicio de comedor a los hombres. Su lugar lo ocuparon las Hermanas del Sagrado Corazón de Jesús.
Cuando empieza la guerra civil, los amos de la colonia se exilian a Francia, y la colonia pasa a manos de un comité de la CNT.
Las hermanas son expulsadas del convento y todos los objetos religiosos son quemados. La planta baja del convento es utilizada como almacén militar y la superior para reuniones.
Tras acabar la guerra, los amos vuelven a la colonia y con ellos las hermanas al convento.
La colonia sigue su funcionamiento hasta que el 1.970 baja el rendimiento textil y con ello se reduce el número de trabajadores. No solo la fábrica nota la decadencia, la religión también pierde fuerza.
Una crisis a finales de los 80 hace que los amos cedan la colonia a los trabajadores y en 1.992 el sector se viene abajo, en el convento quedan pocos alumnos y con solo cuatro hermanas en el edificio, deciden cerrar puertas definitivamente.
Hoy en día, la fábrica sigue abandonada, al igual que las antiguas casas y establecimientos.
Desde el año 2.005, el convento abandonado se convierte en el centro de muestras y exposiciones de arte experimental más importantes de la Catalunya central, el Konventpuntzero.
El edificio no ha sido reformado, el suelo, las paredes, las puertas…, todo sigue igual como lo dejaron. Todavía podemos ver algunos objetos antiguos tales como cuadros religiosos, y algunas reliquias.
Aquí os dejo la página web donde podréis informaros de todos los programas que hacen a diario (haz click aquí).
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En la planta baja del edificio se hallaba la cocina, el comedor de hombres y mujeres, las aulas y el recibidor.
A día de hoy podemos encontrar a más a más el servicio de bar.
En su interior nos encontramos con un viejo piano y varios objetos como radios antiguas...
En la primera planta residían las hermanas. Allí mismo se encontraba la sacristía y la capilla donde realizaban misas.
En la segunda planta las habitaciones de las jóvenes muchachas que residían en el convento y un comedor donde lo utilizaban para coser y rezar.
La tercera planta también estaba destinada a las jóvenes residentes.
Un lugar con un encanto especial... ¡no olvides tomarte una copa en el jardín! ;)
