Mientras ordenaba en el ordenador mis últimas fotos realizadas, me acordé que tenía una carpeta con fotos de Sant Pol de Mar.
Por suerte soy una persona ordenada y di enseguida con la carpeta “Sant Pol_2005”. Fue entonces que me dije que esas fotos (aunque algo antiguas) deberían estar sin duda alguna en este blog y en el apartado VISITANDO PUEBLOS. ¿Os preguntáis por qué?
La respuesta es bien sencilla, porque este pueblo no es solo para mí uno de los más bonitos de todo el Maresme, no es que una de las mejores Chefs sea nacida ahí y que tenga un restaurante con “tres estrellas Michelin”, no es solo un pueblo turístico…, para mí tiene un sentimiento difícil de explicar ya que ha sido el pueblo donde pasé mis mejores veranos… ¡mi infancia!
Sant Pol de Mar ha sido el centro de reuniones familiares durante casi dos décadas, de idas y venidas, ...de risas escuchando en cassette a “Eugenio”, de oír canciones de la época a través de la radio, desde el "Voyage, voyage" o "You're my heart, you're muy soul"... pasando por el" thriller "de Michael Jackson o la mítica "Walk of life" de los Dire Straits...
De mañanas disfrutando de la playa o recogiendo caracoles en la montaña tras la lluvia, de tardes haciendo la siesta, jugando al “remigio” o al “cinquillo” (apostando siempre con duros y pesetas), de tardes de paseo y juegos (jugando en la calle cuando no existían nintendos ni plays), de ver películas de “Andrés Pajares y Fernando Esteso” en vhs en casa de mis primos y de noches tomando el fresco junto a la playa, o simplemente escuchando habaneras los días de fiesta mayor.
De mañanas disfrutando de la playa o recogiendo caracoles en la montaña tras la lluvia, de tardes haciendo la siesta, jugando al “remigio” o al “cinquillo” (apostando siempre con duros y pesetas), de tardes de paseo y juegos (jugando en la calle cuando no existían nintendos ni plays), de ver películas de “Andrés Pajares y Fernando Esteso” en vhs en casa de mis primos y de noches tomando el fresco junto a la playa, o simplemente escuchando habaneras los días de fiesta mayor.
Viernes viendo el "Un, dos, tres... responda otra vez"... De sábados y domingos enganchados a “Erase una vez el hombre”, “La Abeja Maya”, “Marco”, “Starsky y Hutch”, “Los hombres de Harrelson” o "La casa de la pradera”… Años más tarde nos pasamos a la serie “Dallas”, “Dinastía”, “El equipo A” y la inconfundible serie “V”.. Todo en un televisor en blanco y negro y sin mando, peleándonos a ver quien se levantaba para cambiar de canal.
Todas esos recuerdos sin olvidar los ricos helados que nos compraba mi abuelo en el bar dels "Burinons", ...los de limón, los de leche o el famoso frigo pie,... aunque nos moríamos de ganas por comer una "copa de helado" en la heladería del Carrer Nou.
De los fresones que nos traían directos del huerto (todavía huelo a fresas), de recoger piñas en la montaña para posteriormente hacer una barbacoa en la terraza. Esas piñas que también servían en semana santa, cuando todavía hacía algo de frío y las echábamos a la “llar de foc”.
Sí, en semana santa empezaba nuestra temporada, subíamos unos días con nuestros abuelos y tras bendecir la palma y los palmones, días más tarde tocaría ver la procesión (ese día en el que antiguamente mi abuela no nos dejaba ni cantar ni comer carne… ¡Ay si levantara cabeza!).
Lo mejor de semana santa era la esperada Mona de Pascua que compraban en la pastelería de los Sauleda (la pastelería de toda la vida), y ver y oír las "caramelles" que pasaban por las calles y bajo nuestro balcón.
Pues sí, Sant Pol es mucho más que un pueblo, es un sentimiento.
Dicen que... “LO QUE UNO AMA EN LA INFANCIA, SE QUEDA EN EL CORAZÓN PARA SIEMPRE”.
Dicho todo esto, os dejo a continuación un breve resumen de la historia de Sant Pol extraído de la web https://santpol.cat/el-poble.
SANT POL DE MAR es un ejemplo de pueblo mediterráneo, con las calles estrechas y sus casas blancas y escalonadas, con la costa recortada por las playas de arena limpia y granulada que recuerdan sus orígenes marineros.
Y no puedo irme sin nombrar a Carmen Ruscalleda, aquella joven que empezó vendiendo en la charcutería familiar (donde mi abuela me mandaba a comprar embutido) y que años más tarde se ha convertido en la mejor Chef del mundo.
CARME RUSCALLEDA (Sant Pol de Mar, 1.952)
Cocinera catalana con cinco estrellas Michelín. Tres estrellas por el restaurante Sant Pau de Sant Pol de Mar y dos por el que tiene en Japón, en el centro de Tokio.
Aquí os dejo su interesante biografía:
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/ruscalleda.htm
Y aquí la web del restaurante en Sant Pol: https://www.ruscalleda.cat/es
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Las fotografías en blanco/negro o sepia que os muestro a continuación, son extraídas de páginas online y de una exposición de fotografías sobre el Maresme, que se realizó en el "Centre cultural i d'esbarjo" en el año 2.002.
Las imágenes en color son las que realicé un día de enero allá en el 2.005. Pasé un día fotografiando los rincones más emblemáticos que formaron parte de mis veranos y que nunca pensé que podría darles vida a través de este blog.
No descarto volver un día de estos (antes del verano) y volver a retratar toda la arquitectura modernista que tiene Sant Pol, Les Escoles, la casa del Dr. Roura, Can Planiol y Can Tió, ya que gozan de una gran belleza y dan una identidad propia a Sant Pol.
Pensando también en fotografiar más detalladamente la iglesia de Sant Jaume y su bonita ermita.
(Mi objetivo "gran angular" me está pidiendo que vuelva) ;)
(Mi objetivo "gran angular" me está pidiendo que vuelva) ;)
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Una mañana de enero del 2.005, cogí el tren con una amiga y nos dirigimos a Sant Pol de Mar. Tras media hora de trayecto y dejar atrás Mataró, poco quedaba para llegar a nuestro destino... Arenys, Canet y por fin Sant Pol.
La estación la recordaba igual a años atrás, la única diferencia es que esas barcas que siempre habían traido pescado y que estaban en la playa en frente de la estación, habían sido cambiadas por otras más modernas y con motor.
La estación la recordaba igual a años atrás, la única diferencia es que esas barcas que siempre habían traido pescado y que estaban en la playa en frente de la estación, habían sido cambiadas por otras más modernas y con motor.
Jugando a la petanca frente a la estación. |
Y aquí las barcas de hoy en día
La siguiente imagen corresponde a los años cuarenta, un coche "escarabajo" llegando a la Punta.
La Punta es un mirador de la playa construido entre los acantilados y el mar, un proyecto del Doctor Furest.
Ha sido el punto de encuentro de muchos "santpolencs", así como escenario de muchas actividades populares tales como la sardana.
La Punta |
En las siguientes imágenes podéis comparar las fotografías de los años veinte y cuarenta con las más actuales.
En el paseo del Doctor Furest se encuentra la "Platja de les Escaletes" donde tantas veces tomábamos el sol. Todavía recuerdo esa colchoneta de colores y los primeros flotadores en forma de animales tales como el cocodrilo y la jirafa, entre otros...
Platja de les Escaletes |
Mirador público |
El final del paseo se cierra con la siguiente imagen, la playa de la Platjola, aunque para mi familia siempre fue "la platja de Can Lluís".
En Can Lluís y en las Escaletes, mi padre se pasaba muchas noches pescando con sus cinco cañas.
Una vez llegamos al final del paseo podemos subir por estas escaleras (ver siguiente imagen), que nos llevarán a la parte alta de Sant Pol y donde está situado uno de los mejores hotel/escuela de cocina, Gran Sol.
Inconfundibles estos terrados. En la imagen siguiente podéis ver el hotel Gran Sol a final de los años cincuenta. |
Hotel Gran Sol |
Panorámica desde la ermita de Sant Pau |
En las siguientes tres imágenes tomadas desde la ermita, podéis ver el cambio que ha tenido Sant Pol a lo largo de los años
Panorámica de la estación con las barcas de pesca y dos trenes de vapor, entre la primera y segunda década del siglo XX. |
Aquí se puede observar mucho mejor como el temporal se ha llevado la arena de la playa. ¡las barcas casi cruzan las vías del tren! |
Y desde la ermita bajamos por la siguiente calle...
Si continuáramos por esta calle llegaríamos de nuevo a la estación de trenes. |
Vista del Carrer Nou en la primera década del siglo XX |
Y aquí la misma calle... ¡cien años más tarde! |
Aquí una panadería de toda la vida, creo que se llamaba Victoria. |
Sobre este puente pasa la nacional |
En esta calle (semidesierta en los años 70/80) jugaba con mis hermanas y primos a pelota, a tenis con las palas de playa e incluso pedaleábamos con la bicicleta. |
Tras estas rejas se esconde un hotel que hoy mismo ni recuerdo el nombre y no se si sigue abierto... |
Y este es otro establecimiento de toda la vida. Hostal Miliets. |
Si cruzamos la carretera nacional podríamos entrar por un camino que te lleva a la montaña, ...donde tantas veces habíamos ido a recoger piñas para la chimenea...
Este también fue un bar de toda la vida "Burinons" (ver siguiente imagen).
Todavía recuerdo al joven muchacho que servía tras la barra, al que le comprábamos el "frigo pie" o el "conde Drácula", el helado de leche o de limón.
Aquí muchos abuelos se pasaban horas jugando a las cartas y al dominó.
¡La de veces que había tenido que ir a avisar al mio para que subiera a comer!
Desde la calle Bonavista bajamos hasta Manzanillo y en la esquina de la calle Havana se encuentra la pescadería "Tomasa", que según "don Google" sigue activa.
En primer plano y a la derecha, una farmacia que ha estado en activo durante muchos años y un poco más arriba está situada la pastelería Sauleda. |
Esta casa siempre me había llamado la atención por su peculiar y original entrada |
Esta es una fotografía de los años veinte, pertenece al Carrer de la plaça. Se puede observar dos niños en el balcón de Can Tió y a la derecha había una tienda (Can Reig), donde primero se vendía artesanía y más tarde hilos y tejidos. En la imagen siguiente podéis ver la misma calle setenta años después. |
Campo de fútbol de Sant Pol |
La riera de Sant Pol que pasa bajo las vías del tren. Un poco más a la derecha de esta zona ponían las atracciones para la "Festa Major". |
A continuación os muestro unas fotografías de los años cincuenta, cuarenta y diez respectivamente.
Como podéis ver, junto a la riera se construyeron campos de cultivo que hoy en día ya no existen. Tampoco existen la mayoría de las torres de la época ya que se construyeron edificios.
Como podéis ver, junto a la riera se construyeron campos de cultivo que hoy en día ya no existen. Tampoco existen la mayoría de las torres de la época ya que se construyeron edificios.
Ayuntamiento de Sant Pol de Mar |
Esta es la calle de Consulat del Mar. Esta pescadería "Peixateria Carbonell", también lleva toda la vida abierta, y delante estaba la peluquería donde ibámos toda la familia. |
Junto a estas "Fincas", está situado el "Café del Centre", uno de los cafés más antiguos. |
Recuerdo perfectamente este cine con sus sillas de madera :) |
Esta fuente data del siglo XVIII (según don Google) y fue todo un símbolo en los 70/80, ya que muchos pies han pasado por aquí para quitar la arena de la playa... ;) |
Esta ventana que veis cerrada era la del Kiosko donde siempre comprábamos de todo. ¡Parece que hoy ya ni existe! |
La tienda de Sant Pau, una tienda donde vendían de todo, desde flotadores hasta souvenirs y cosas de la casa. |
Restaurante Sant Pau, tres estrellas Michelín |
En esta calle había tomado los mejores helados en copa |
En esta tienda de la derecha vendían de todo, yo estaba enamorada de esta tienda y siempre paraba a ver los escaparates. |
Sant Pol de Mar, un pueblo de idas y venidas :)
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Y no me puedo ir de este reportaje sin explicar de donde viene la expresión Sant Pol, quina hora és?
"15 de febrero de 1714. Las tropas de Felipe V, sitian en Sant Pol a los valientes voluntarios catalanes del regimiento de Amill.
La valerosa defensa que sostuvieron los sanpolenchs contra las tropas francesas que Felipe V de Castilla puertas para implantar el absolutismo en nuestra tierra, fue motivo de la destrucción de aquel pueblo. Apurando todos los recursos y delante de la superioridad de las del enemigo, abandonando el pueblo por las donas y'ls viejos, se posesiones los soldados del de Anjou, de Can'n Reig y desde alli fueron dueños de la población.
Pero'ls valientes voluntarios mandados por el compañero y amigo del general Moragas, En Villar de Sant Pol en numero de 50 hombres escullits, se retiraron y s hicieron fuertes en la torre de Martina que encare avuy levanta á cosa de mixto cuarto de la población, jurando morir avants que rendirse.
Desde allí vieron aquellos valientes el saqueo y quema de la villa, y 'el castigo impuesto á la s campanas que tocar en somatent que fuesen destrossadas, el mismo que'l reloj públich. El vengativo monarcaprohibí la reedificación del pueblo; pero pasada la guerra vuelven a sas hogares los sanpolenchs situándose en tiendas formadas con mantas y palos, cerca de la playa. Tiendas que habian de arrancar más que deprisa refugiantse en las barcas de pescar, cada vez que'ls ejecutores de la bárbaras órdenes del rey verdugo iban pera hacer efectivo el su cumplimiento.
Aquellos estados de cosas llevará algún tiempo; el santpolench, el bribón por la causa del absolutismo, no tenía otro abrich ni cobijo que la manta, y la voz de las campanas de su reloj ya no le avisaba del peligro de las libertades de la tierra.
Allavoras fue cuando nació el adagio que se sello de la gloria pera Sant Pol de Mar:
"En Sant Pol la manta Y la gente bergantín"
De allavors fecha también el ¿qué hora se ?, sátira que recordaba y recuerda encare aquella terrible hora de la pérdida de las libertades de la tierra catalana.
Los hijos de Sant Pol s'enfadan al sentir el infamante pregunta y tienen razón. ¿Cuanto será que ellos y nosotros, los de S. Pol y 'ls de toda Cataluña podrá contestar a los que' ns pregunten ¿qué hora es ?:
La hora de que Cataluña recobre perdido. "
La leyenda sobre: "Sant Pol, qué hora es?"
(Texto copiado de la web Sant Pol)
Cuentan las "malas lenguas" que en la época de los relojes de sol, a la población, se restauró uno que había quedado dañado debido al sol y la lluvia y que, para evitar que los volviera a pasar lo mismo una y otra vez, se les ocurrió de cubrirlo, lo que provocó que perdiera su utilidad, quedando la busca en la sombra del toldo.
Y, como suele suceder, la leyenda sirvió a las poblaciones vecinas para hacer mofa y al pasar por el pueblo, sobre todo con el tren, hacían siempre la misma pregunta a los santpolencs ...
Con el paso del tiempo, sin embargo, la población aprendió a convivir con la anécdota hasta el punto de llegar a utilizarla como eslogan de presentación de la propia población, lo que en otra época hubiera sido impensable:
"Es la hora de Sant Pol!" Es, hoy, la frase reclamo del turismo en nuestra ciudad, como tiempo atrás lo había sido "Sant Pol, a toda hora!".
|